Cuando Pepe regresa de vacaciones trae muy mala cara. Pedro le pregunta: -¿Qué tal, Pepe, cómo han ido las vacaciones? Pepe suspira y le responde: -Pues verás, aparte de que el viaje en avión fue espantoso, el tiempo una porquería, el mar imposible, los mosquitos mortales, el calor infernal, el ruido incesante, la comida pésima y la cuenta carísima... ¡todo ha ido la mar de bien!