Libro de chistes cortos buenos

Jaimito y la madre, van a visitar a un amigo que se había quedado manco por un accidente... cuando llegan a su casa, el amigo le dice: -Hola Jaimito! -Hola! Y la madre que los estaba observándolos le dice a Jaimito: -¡No seas maleducado, dale la mano! -¡Mamá! ¡Te juro que yo no la tengo!