Se encuentran dos amigos por la calle y le dice uno al otro: -¿Qué tal te va con la sordera? -Muy bien, me compré un audífono que es una pasada, oigo hasta cuando cae un alfiler al suelo, lo malo es que ayer no pude bien dormir porque me despierta cualquier ruido... -¿Y cuanto te ha costado? -Pues a las seis y media.