Una chica excitante quiere subir al autobús. Lleva una falda corta d con cuatro botones atrás. No puede subir. Se abre el botón... no puede. El segundo... no puede; el tercero... no llega hasta arriba. Un chico detrás de ella la empuja hasta arriba. -¡Usted es un insolente, sinvergüenza! -se encara al joven, dispuesta a arañarle. -¿Sinvergüenza yo? ¡Ya es el tercer botón que usted me abre de la bragueta ...!