Libro de chistes cortos buenos

Un curandero encuentra a un viejo amigo y le pregunta acerca de la salud de su familia. -Mi hermano se encuentra muy enfermo -contesta el amigo. -¡Tu hermano no está enfermo -le contradice el curandero-. ¡Él cree estar enfermo! ¡Recuérdalo, lo cree solamente! Un mes más tarde, los dos amigos se encuentran de nuevo, y el curandero pregunta sobre el hermano del amigo. -Está mucho peor. ¡Ahora cree estar muerto!