Libro de chistes cortos buenos

Cuando mi padre estaba trabajando en el jardín, mató a un enorme rata y él deseando que la noticia no llegara hasta los vecinos, nos dijo a nosotros, sus hijos, que eso era un secreto de familia, ya que las ratas eran cosas horribles y sucias. El padre no tardó en enterarse que su hijo de cinco añitos le había dicho a su profesora en clase: -Tenemos un secreto de familia, pero no lo puedo contar, porque es algo horrible y sucio.