Libro de chistes cortos buenos

Un matrimonio se está peleando y la mujer le pide el divorcio al marido: -Yo me quedo con la casa y con el niño. -¿Y eso por qué? -pregunta el marido. -Pues porque es mío, lo llevé en mi vientre. -¡Pero si tampoco es tuyo! -contesta el marido. -Ah, ¿no? ¿Y quién lo parió? -No sé... ¿Recuerdas el día que nació, estando en la maternidad, que se ensució y me dijiste que lo cambiara? -Sí... -Pues eso hice... ¡Lo cambié!