-Verás Puri. La semana pasada me lié con un hombre maravilloso. -Ah sÃ, ¿y quién es? -No lo conoces. Ayer lo conocà en un restaurante y me lo llevé para mi casa. -Oh, ¿y cómo fue? -Pues mira, bien y mal. Bien por todo pero, pero luego me contó que era el marido de una amiga mÃa y eso me angustió. Incluso voy a terapia. -¿Para sacártelo de la cabeza? -No, para que no me angustie cuando viene a verme.