En una convención de científicos, un investigador señala a otro: -¿Sabías que hemos cambiado a las ratas por abogados? -No, no lo sabía. ¿Y eso por qué? -Por tres razones: Porque descubrimos que los abogados eran de largo los más abundantes. Porque nuestros asistentes no se encariñan tanto con ellos, y tercero porque los abogados hacen cosas que una rata no hará nunca.