Libro de chistes cortos buenos

Esto era el camarero Pepe que de pronto le llega un tipo y le dice: -Le apuesto 200 euros a que soy capaz de mear en un vaso, a 5 metros y sin que caiga ni una gota.. El camarero Pepe acepta. El tipo se saca la chorra y empieza con la operación, pero acaba meando por todo el bar salvo por el vaso. El camarero sonría triunfante y el hombre se acercó a un grupo de chicos para luego volver también sonriente: -Aquí tienes los 200 euros. -¿De qué te ríes? has perdido. -Acabo de apostar con esos chicos 500 euros a que era capaz de mear por todo el bar y tú ni te enfadarías sino que son reirías.