Jaimito protesta: -¡Uf, qué rollo, me apetece ver la tele pero tengo una montaña de deberes pendientes, vaya aburrimiento! Su madre le responde: -Vamos, Jaimito, que yo sepa, aún no se ha muerto nadie por hacer los deberes. Y Jaimito le replica: -Sí claro, pero yo no quiero ser el primero.