Libro de chistes cortos buenos

En una residencia de ancianos, un abuelo le pregunta a otro: -¿Por qué te discutiste el otro día con tu compañero de habitación? -Por abusón. -¿Por abusón? -dice el otro, perplejo. -Sí, se ponía mis camisas, mis corbatas y mis trajes... ¡Pero la gota que colmó el vaso fue cuando se rio de mí con mi propia dentadura postiza!