Libro de chistes cortos buenos

Un marido, al volver a su casa, descubre a su mujer en la cama con otro. Enfurecido, grita: -¡Desgraciada, te voya a matar... Te haré pedazos! Y después, volviéndose al hombre: -¡En cuanto a ti...! -¿En cuanto a mí? -susurra el hombre, levantándose y exhibiendo un cuerpo de luchador. -En cuanto a ti... Es mejor que se vista usted, no vaya a ser que coja un resfriado.