La noche de su aniversario de bodas, el marido se despierta llorando. Cuando su mujer le pregunta la causa, él contesta: -Recuerdo la tarde que tu padre nos pilló haciendo el amor sobre el heno de los corrales, y nos obligó a casarnos bajo la amenaza de llevarme ante el juez. Me hubiesen condenado a veinticinco años de cárcel... ¡Pues ahora que lo pienso... que hoy ya estarÃa libre!