Libro de chistes cortos buenos

Un matrimonio de gitanos en la cama. En un arrebato pasional, él exclama: -¡Pepa, déjame que te muerda un pecho... -¡No! -grita ella muy indignada-. ¡Recuerda que estamos en Semana Santa y no se puede comer carne! Pero el marido, insistente, replica: -¡Pues te morderé el higo, que la fruta se puede comer en la Cuaresma!