Libro de chistes cortos buenos

El médico después de examinar a su paciente: -Señorita, no hay duda: usted está embarazada. -Pero, doctor, ¡eso no es posible! ¡Yo soy virgen, se lo aseguro! El médico se acerca a la ventana, mira el cielo y murmura: -La última vez que ocurrió ese milagro, apareció una estrella en el firmamento.