Libro de chistes cortos buenos

Un hombre casi impotente se hace aplicar hormonas de mono de una forma intensiva. Obtiene éxito, y su señora da a luz un bebé. -¿Es niño o niña? -pregunta muy excitado el orgulloso padre. Y la enfermera le contesta: -Lamentamos no poder aún satisfacer su curiosidad. Ya lo haremos cuando la criatura se baje de la lámpara.