Libro de chistes cortos buenos

Un borracho entró en una cafetería gritando: -¡Feliz navidad y próspero año nuevo a todos! Un cliente que estaba al lado todo perplejo le dice: -¡Por Dios hombre! En pleno verano, usted está mal de la cabeza. -¡Oh no, en casa me van a matar, jamás llegué tan tarde!