Libro de chistes cortos buenos

Iba un tonto a Madrid y el taxista decide quedarse con él: -¿Sabe? Aquí en Madrid, se va atropellando a los peatones para ganar puntos. -¿Sí? ¡Qué divertido! -Mire, ¿ve ese hombre? Debe valer unos 00 puntos, ¿vamos a por él? -Sí, sí, ¡venga, vamos! El taxista se va acercando, y cuando le va a atropellar, se aparta. -¡Mecachis! ¡Se nos ha escapado! Pero bueno, vamos a por ese niño, que por ser niño vale 200 puntos. -¡Sí, sí! vamos a por él. Y otra vez hace lo mismo, se va acercando y de repente se aparta. -¡Se nos ha vuelto a escapar! Pero ahí hay una señora mayor que vale 300 puntos. Nuevamente sucede lo mismo pero tras esquivar se oye un gran golpe y el loco dice: -¡Menos mal que he abierto la puerta, porque sino, la vieja también se nos escapa!