Libro de chistes cortos buenos

El marinero llega a puerto tras 2 meses en el mar. Ha cobrado y piensa ir a una casa de pilinguis porque necesita una mujer urgentemente. Ya en la fanea con la mujer, se da cuenta de que no pude y ella le pregunta: -¿Hay algún problema? -En realidad sí, después de todo este tiempo todavía no me acostumbré a suelo firme. La buena mujer se esfuerza y mueve el colchón simulando un oleaje. Pero la cosa no mejora. -Es que apenas hace viento ni relámpagos y ni nada. Así no puedo. La mujer dice que le cobrará más pero acepta el reto, se pone a soplar y juega con las luces. Pero igualmente sigue sin funcionar. Ella pregunta: -¿Entonces, lo hacemos o qué? -Tú estás loca, como vamos a hacerlo ¡con este mal tiempo que hace!