Unos amigos van a una zapatería y preguntan por el precio de unos zapatos que les gustan. El dependiente les dice que cuestan 200 euros, y uno de los amigos le pregunta, extrañado: -Pero, ¿qué tienen de especial? -Señor, es que estos zapatos son de cocodrilo. Así que los dos amigos, viendo que pueden hacer ellos mismos un buen negocio, deciden ir al Nilo a cazar unos cuantos cocodrilos. Extenuados, cuando ya llevan cerca de dos mil cocodrilos cazados, uno le dice al otro: -Cazamos un par más y como tampoco lleven zapatos lo dejamos, ¿no?