Libro de chistes cortos buenos

Un viajante de comercio regresa un día ante de lo anunciado a su casa. Su esposa ya se encuentra en cama. La ve muy nerviosa. Rápido se desnuda, y pretende colocar su traje en el armario ropero. Pero, cuando abre la puerta, se tropieza con un muchacho desnudo que está escondido en el fondo,. Furioso, grita a su esposa: -¿Cuántas veces te he de decir que coloques a tus amantes en tu armario, y no en el mío?